Con el paso del tiempo, es habitual necesitar pulir cada cristal del coche. Y es que en las lunas del vehículo pueden ir apareciendo poco a poco varios arañazos. El motivo principal suele ser por la limpieza de estos con productos o elementos que rayen los cristales.
No obstante, también puede deberse a pequeños impactos que reciben las lunas mientras vamos conduciendo. O incluso por limpiarlos con los productos adecuados, pero arrastrando elementos que se encontraban posados sobre ellos. Entre ellos se encuentran el polvo, la arena y algunas piedras e insectos.
También podemos rayar las lunas del vehículo al tener un limpiaparabrisas en mal estado, o por activarlos cuando no hemos aplicado ningún líquido previamente. Así que debes tener mucho cuidado con esto, ya que suele ser uno de los motivos principales de la aparición de rayones.
¿Por qué debes pulir los cristales del coche?
Con el paso del tiempo, los cristales del coche van recibiendo arañazos por los motivos anteriormente comentados. Esto le puede impedir al conductor tener una buena visibilidad de la carretera durante su conducción. Incluso, debido a los arañazos, los reflejos de las luces de otros coches, pueden resultar bastante cegadores.
Por este motivo, se convierte en algo necesario pulir cada cierto tiempo el cristal del coche. Ya no solo por un motivo estético, sino también por la seguridad del conductor y de sus acompañantes.
Así puedes pulir los cristales del coche en casa
Debes tener en cuenta que siempre es recomendable contar con un profesional cualificado, que sea especialista en pulir cristales de coche. No obstante, si deseas hacerlo en casa, puedes adquirir un kit de pulido para el parabrisas.
Los hay de diferentes tipos, pero todos suelen incluir varias lijas que deberás colocar en un taladro eléctrico. Con este podrás lijar una fina capa de los cristales del coche para eliminar los arañazos más superficiales, siempre siguiendo las instrucciones del fabricante. También suelen incluir un paño de microfibra para limpiar el cristal muy bien antes y después del pulido.
En el caso de que los arañazos de las lunas sean demasiado profundos, no sería recomendable pulirlas, pues podría rajarse el cristal del vehículo al completo. En estos casos es preferible hacer una sustitución del parabrisas o una reparación del mismo.